¿Todos los canales son iguales?

Autor: Stux Licencia CC: BY SA (etiquetadas para la reutilización)

¿Todos los canales son iguales?

Vemos que la actividad desarrollada dentro del aula no es tarea fácil, pues debes tener en cuenta factores de los que antes no eras consciente. Es imposible pensar en educación sin pensar en la comunicación, ya que es la base de la misma.
En el aula debemos lograr que el receptor, es decir los alumnos, sean los auténticos protagonistas ya que es a ellos a quien está dirigida la clase. El mensaje tiene que ser claro y que esté bien estructurado para facilitar el trabajo y comprensión de los alumnos, con capacidad de aportar, que la comunicación en el aula no sea de una única dirección. Planificar ayuda a solventar posibles errores propios de la improvisación, siempre hay que tener en cuenta al público al que va dirigido y el canal más apropiado para la comprensión del mismo.
Sobre el canal debemos conocer todas las posibilidades para poder elegir entre las diversas opciones la que más se adapte a la situación. Pensar una buena estrategia comunicativa pasa por tener en cuenta a la persona, colocándole como centro de la misma, en ir más allá de lo común, no quedarte en lo básico y clásico. Tendremos en cuenta a la hora de elegir el canal hacia quién va dirigido el mensaje, qué queremos trasmitirle o hacerle llegar, la velocidad o forma con la que queremos que lo reciba y cuál es la finalidad que buscamos, una buena elección de este es necesario para lograr el éxito en nuestra comunicación.
Hemos podido ir viendo como con el paso de los años los canales hasta ahora establecidos han sido modificados, debido a la incorporación de nuevos medios de comunicación distintos a los hasta ahora conocidos. Encontramos en ellos una nueva forma de comunicar, una forma que te permite romper las barreras del centro, estos medios tienen un alcance totalmente distinto. Sin embargo la aplicación de estos nuevos medios no implica la desaparición de los hasta ahora conocidos, pueden compenetrarse los unos con los otros, eligiendo el más oportuno para cada situación y momento.
Debemos tener en cuenta las limitaciones de las familias del centro, ya que no todos pueden tener acceso a estos nuevos medios, como son las redes sociales, por lo que se puede convertir en un obstáculo para la comunicación. Tenemos que ser capaces de proponer alternativas para que el mensaje llegue a todos de la mejor forma posible y no olvidar a una parte del centro. Dependiendo del mensaje debemos saber que en las redes sociales puede tener un alcance que no es el deseado, como que llegue a personas a las que no deseábamos que lo recibieran o que no lo reciban quien realmente queríamos que lo recibiera, de ahí la importancia del canal utilizado en cada situación.
Para el éxito de nuestro comunicado con las familias hay que lograr la participación de ellas, que no sea un simple discurso en el que se limitan a escuchar sin participar. Tenemos que seleccionar bien nuestras palabras que sean claras y accesibles para todos y no informar en exceso, un mensaje con información excesiva puede dificultar a las familias entender la auténtica idea del mismo.

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